Es una enfermedad crónica caracterizada por el consumo habitual de tabaco, es decir, una adicción provocada principalmente por uno de sus componentes activos, la nicotina. Esta adicción es un factor de riesgo asociado a enfermedades como el cáncer, bronquitis, ataques cardiacos, accidentes cerebrovasculares y muchas más, razón por la cual se considera que el tabaquismo es una epidemia global.
Las personas adictas al tabaco son dependientes de tres factores:
La práctica más común de consumo de tabaco es fumar. Cuando se expele el humo del tabaco se generan más de 4.000 sustancias tóxicas y de estas unas 60 son cancerígenas.
El Tabaquismo fue el responsable de 100 millones de vidas durante el siglo XX y se estima que esta enfermedad podría acabar con 1000 millones de vidas durante el siglo XXI.
En la actualidad, la inmensa mayoría de los fumadores empiezan a hacerlo antes de los 25 años, a menudo en la niñez o en la adolescencia, 8 de cada 10 fumadores contraen el hábito en la adolescencia. Actualmente la tendencia se ha feminizado a nivel de los jóvenes, es decir cada día más mujeres se inician en este mal hábito.
Si, actualmente existe una gama de medicamentos para abandonar la adicción al tabaco, controlando el factor biológico de la dependencia. Estos medicamentos se deben aplicar bajo control médico y continuo monitoreo. Para el control social, una de las alternativas mundiales es el Convenio Marco para el Control del Tabaco de la OMS. Esta organización sugiere a los distintos países, todo lo pertinente al control del tabaco.
Fumar produce cáncer de pulmón y este es el motivo mas frecuente de mortalidad por cáncer. La distancia entre la llama y el cigarrillo cuando decidas no encenderlo cambiará tu vida. Toma el control hoy, busca ayuda de un especialista y deja de fumar.
90% de las personas que padecen de cáncer de pulmón son fumadoras. Decídete a dejarlo.
El cigarrillo contiene un aproximado de 4.000 compuestos químicos, de los cuales más de 60 son causantes de cáncer. Tú puedes dejarlo.